Carta abierta a la acaverga argentina de letras

Muchachos: reivindicación urgente de "Adán Buenosayres".
Están a tiempo de desempolvar al autor más genial que han dado las letras argentinas; no sean orgullosos ni mediocres, seguirán comiendo gracias a nosotros y seguirán sacando sus novelitas llenas de teorías, claves, guiños y giros que a nadie le importan. ¿Qué les cuesta admitir que nadie en el país ha escrito ni escribirá jamás como Leopoldo Marechal, si su escritor insginia murió hace ya un tiempo y a ustedes ya no los lee ni su familia sino es por imposición de sus cátedras absurdas?
Basta ya de los Gaperro, los Kohan y los críticos que plantean la muerte del autor; el autor sigue vivo, sigue intentando desentrañar la condición humana y, por suerte, sigue riéndose de ustedes; pero esto no quita que, profundamente amargado, vea como la maquinaria crítica, amparado en sus "lecturas", dicte a los futuros profesores su errática y rencorosa e interesada visión de lo que es la literatura en la Argentina.
La literatura no es lectura de lecturas o escrituras. La literatura es algo más bien parecido a una enfermedad; literatura son los fantasmas de Sábato, el frustrado deseo de Cortázar de ser músico de jazz, la ronda de mates que Hernández compartió con los gauchos de la estancia de su padre, la amistad de Marechal y Xul Solar, y todo lo que salga de gente noble y desinteresada.
Ustedes son una bolsa de gatos miopes.